Desde el día cuatro de septiembre, en YouTube circula un video, de un minuto y catorce segundos, titulado
Un
sargento venezolano robando en Pacaraima.
Villa Pacaraima, BV-8, La Línea, es la localidad brasilera
contigua al hito Brasil-Venezuela número ocho (BV-8), una población de alrededor
de siete mil habitantes dedicados a la agricultura, empleados en las
instituciones públicas con oficinas en el extremo norte del país, comerciantes
o empleados de las tiendas.
En el video, un hombre moreno, de cabello muy corto, de
vientre prominente, cubierto por una franela polo amarilla con blanco, es
cercado por una docena y media de hombres contra la plataforma de un camión.
La Suapí es la principal vía comercial de Pacaraima. La zona
prosperó entre finales de los 90 y comienzos del siglo que corre gracias al
cambio que entonces permitía a los venezolanos ir a comprar Calabresas
(chorizos), Garotos (bombones), Havainas (chancletas) y todo tipo de suvenires
en colores verde y amarillo. Pero ahora, es septiembre de 2015 y el cambio pasa
de los 155 bolívares venezolanos por cada real brasilero y las lojas,
tiendas, de la Suapí, venden muy poco. Apenas sobreviven participando del juego
del cambio.
Entre los comerciantes se dice que ahí, en la fotocopiadora,
ubicada muy cerca de la agencia de Bradesco, se cambian bolívares por reales o
viceversa, reales por dólares o al contrario, que lo de las xeros, fotocopias, no es más que una
fachada
Es dos de septiembre, poco después de las 11:00 de la
mañana, hora de Brasil, media hora menos en Venezuela, y el dueño del
establecimiento sale a almorzar.
Mientras el propietario se aleja, dos hombres, se acercan a
la empleada del local. Uno de ellos va armado, La reseña de roraimaemfoco.com la identifica como
J.O.T. Los hombres le exigen que les
entregue el dinero. J.O.T se resiste. El hombre del vientre prominente la
obliga a caminar hacia el fondo del local, a punta de cañón. La chica se niega.
Él la patea. Le propinó un chute
precisa la página web, pero la mujer se opone como puede. J.O.T, relata otro de
los comerciantes de la Suapí, intenta
zafarse y pierde dos de sus larguísimas uñas acrílicas decoradas en estampados.
Los dos sujetos insisten y ella grita pidiendo auxilio.
Los gritos alertan a quienes aguardan en el Ponto de Taxis y, ante la inminente
llegada de los vecinos, uno de los hombres huye con el arma. Entonces, taxistas
y pasajeros se acercan y someten al extraño de la polo amarilla con blanco.
En el video, al tiempo que una mano intenta impedir que el
autor del audiovisual continúe grabando, otra mano surge de entre la
muchedumbre y va a parar a la cara del hombre. Varias manos le pegan, lo
empujan. Él apenas las esquiva.
Varios de los que participaron de la captura manifestaron
que el trío pasó varias veces por la Suapí en el transcurso de la mañana. Una
vez que los dos descendieron del auto de placas venezolanas, el conductor
estacionó frente al Bistró, a pocos metros de las oficinas del Ministerio da
Fazenda brasilero y esperó.
De acuerdo con la nota publicada en la Folha Web, Jimmy Santana, del Departamento Estadual de Trânsito
(Detran) em Pacaraima, contó que sus agentes se acercaron porque pensaron se
trataba de un accidente vial y que una comisión de la Polícia Civil se aproximó
al percatarse de la aglomeración.
Los
efectivos policiales debieron comenzar por calmar los ánimos de los presentes y
por entender lo que sucedía. Luego, solicitaron al detenido sus documentos. El hombre
de la polo amarilla con blanco fue identificado como o
el sargento primero de la Fuerza Armada
Nacional Bolivariana de Venezuela (FANB) Elvis Geovanny Manrique Marcano, de 25
años.
En no más de tres minutos, los dos acompañantes del hombre de la
polo bicolor traspasaron los 11 reductores de velocidad que separan a Brasil y
Venezuela, las sedes del Ministerio de Hacienda y de la Policía Federal
brasileros, la dependencia del Instituto Brasilero para el Medio Ambiente
(IBama), el Destacamento de Fronteras Número 84 de la Guardia Nacional
Bolivariana (GNB), la Aduana Ecológica de Santa Elena de Uairén y se
internaron, sobre la Troncal 10, en Venezuela, en la inmensidad de la Gran
Sabana.
Se cree que uno de ellos puede ser brasilero.
Sobre el medio día, el detenido fue trasladado a la Polícia
Civil de Pacaraima en donde se le abrió un expediente por intento de robo capturado
en flagrancia.
Manrique Marcano fue llevado a la Penitenciária Agrícola Monte
Cristo, en la zona rural de Boa Vista. En cambio, los otros dos superaron al
menos cuatro puntos de control adicionales y, aparentemente, fueron capturados
en la Alcabala de la GNB en Luepa, aproximadamente a 300 kilómetros de la
frontera.
Es día 16 de septiembre, el Ministerio Público del Estado de
Roraima presenta su denuncia contra el sargento primero Elvis Geovanny Manrique Marcano. El
sargento de 25 años será juzgado de acuerdo a los artículos 14 y 157 del Código
Penal Brasilero. Se le acusa además de sometimiento mediante arma de fuego y por
haber privado a J.O.T de su libertad. De ser considerado culpable,
podría pasar al menos cuatro años tras las rejas, na cadeia.
Al cierre de la nota de globo.com , republicada por Folha Web, un lector comentó:
"Tem que dá um pau nesse veneca rapá".